INTERNACIONAL

Papa pide perdón a indígenas por “indiferencia” de la iglesia en la colonización

 

MASKWACIS, Can. El Papa Francisco pidió perdón “por el mal que tantos cristianos hicieron a los indígenas” durante la colonización y por la “cooperación” e “indiferencia” de la Iglesia católica, en su visita a la localidad donde se encontraba uno de los mayores internados en los que el Estado canadiense organizó los procesos de asimilación de los niños de los pueblos originarios.

Decirles, de todo corazón, que estoy profundamente dolido: pido perdón por la manera en la que, lamentablemente, muchos cristianos adoptaron la mentalidad colonialista de las potencias que oprimieron a los pueblos indígenas”

 

 

El papa Francisco sentado entre los representantes de los jefes de los pueblos originarios y ante más de 2 mil personas, entre ellas muchas víctimas de estos internados.

El Pontífice viajó a Canadá tras la invitación de los pueblos originarios para que viniese a disculparse por los abusos perpetrados en los internados gestionados, muchos de ellos, por la Iglesia católica y donde cerca 150 mil niños fueron arrancados de sus familias, mientras que se ha estimado que más de 4 mil murieron por los maltratos y las enfermedades. La mayoría enterrados en fosas comunes sin ninguna identificación.

Llego hasta sus tierras nativas para decirles personalmente que estoy dolido, para implorar a Dios el perdón, la sanación y la reconciliación, para manifestarles mi cercanía, para rezar con ustedes y por ustedes”

También deseó que su presencia sirva a “trabajar juntos, para que los sufrimientos del pasado dejen el lugar a un futuro de justicia, de sanación y de reconciliación”, antes de agregar que esta visita no es un punto de llegada sino de partida para este proceso.

 

 

El papa, que rezó en el cementerio donde están enterrados muchos de los niños indígenas que murieron en la escuela Ermineskin, explicó que “es necesario recordar cómo las políticas de asimilación y desvinculación, que también incluían el sistema de las escuelas residenciales, fueron nefastas para la gente de estas tierras”.