VENEZUELA, BOTIN DEL CAPITAL FINANCERISTA (Primera parte)
Por Francisco Blanco Calderón
Alfredo Jaliffe: Recordando la frase que en su campaña, Bill Clinton expresó, es “la economía estúpido”. Ahora se avala ante el fracaso en Ucrania, pese al excesos de armas, buques, aviones, drones y bombas, unido al vedetismo del comediante Zelenski, Lo mismo por apoyar a Israel con todo y ante los ojos del mundo, para asesinar al pueblo palestino casi en su totalidad. Su intervencionismo en Irán, Líbano y la destrucción de Irak, los golpes militares en Chile, Guatemala, Ecuador, Panamá, Bolivia, Perú, Colombia, Argentina y Uruguay más los que faltan, entre ellos se entreve a México, la destrucción del pueblo árabe, vietnamita, el de Afganistán, estos últimos se destaca el fracaso rotundo estadounidense, ahora se mueve contra Venezuela cuando EEUU padece su peor crisis energética de la historia. Jaliffe lo corrobora “Es Wall Street”… estúpido. Crear guerras sin ton ni son, representa la primera fuente de ingreso a la economía norteamericana. Es la visión financerista del capitalismo imperial, unilateral, ante la respuesta internacional de la visión progresista multilateral.
“En la actualidad el mundo está dominado económica y financieramente por un sistema oligopólico global especulativo que maneja a su voluntad las variaciones bursátiles a través de su influencia y propiedad de los grandes mercados financieros. Se sustenta en el registro de una serie de valores sin respaldo físico de producción como moneda o producto. Este es asentado únicamente en registros financieros que el poder-prestigio de los nombres de dichas entidades económicas hace que sean válidos y así influir el mercado en contubernio con los principales exponentes de la banca mundial y las potencias de la industria económico global. Los países en desarrollo son clasificados por sus índices macroeconómicos por entidades económicas globales como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial. La realidad es que las potencias económicas globales ofertan “desarrollo” pero condicionado y en realidad es una mezcla entre inversión e intereses económicos y políticos, según el escenario que a ellos les conviene.” (Capitalismo industrial proteccionista y globalización financierista. Ismael Cifuentes).
La gran riqueza de Venezuela no se centra solo en que es el país con la mayor reserva de petróleo del mundo, sino además cuenta con diversos recursos minerales, entre los que destacan el carbón, el oro, el hierro y la bauxita. Existen enormes yacimientos de hierro, bauxita, níquel, carbón, oro, diamantes, calizas y otros minerales no metálicos, además de importantes prospecciones de amianto, fosfato, manganeso, azufre y plomo. Principales productos agrícolas maíz, sorgo, caña de azúcar, arroz, plátanos, hortalizas, café, carne de res, carne de cerdo, leche, huevos y pescado, industria en general, materiales de construcción, procesamiento de alimentos, textiles, minería de hierro, acero, aluminio, ensamblaje de vehículos de motor. Dispone de una de las reservas de hidrocarburos más grandes del mundo y una modernísima infraestructura petrolera. Un país bendecido con una abundancia de recursos naturales, el agua emerge como el tesoro más valioso, en momentos en que todos entregan, incluyendo México, a las grandes empresas el agua. Además de ser el primer país con un sistema electrónico electoral inmejorable.
El Viernes Negro en 1983 que tuvo consecuencias sociales y políticas importantes. Saqueos durante el Caracazo. Por otro lado, el desempleo y la pobreza se elevaron considerablemente: “En Venezuela, la crisis del sistema de conciliación de élites políticas establecido a partir de 1958 con la instalación de la democracia afectó la legitimidad de los partidos políticos y produjo cambios importantes en la dirigencia política del país cuando fue elegido Hugo Chávez como presidente de la república en 1998. La naturaleza de esta crisis, así como su impacto hacia el Sistema Político Venezolano, ha dado lugar a diversas lecturas e interpretaciones por parte de los estudiosos del tema para tratar de comprender y explicar cómo la democracia venezolana, considerada excepcional con respecto al resto de la región, se sumergió en una severa crisis que se evidenció a partir de 1989, mostrando en la actualidad signos de profundización y erosión de las condiciones mínimas para el juego democrático”. (El Sistema Político Venezolano en el período 1999-2020: ¿persistencia o ruptura? Reflexión Política, 2021. Universidad Autónoma de Bucaramanga).
El problema real es que, Venezuela, no se ha disciplinado al mundo globalista dominado por el capital financiero de las grandes empresas trasnacionales del mundo occidental y se ha centrado en relacionarse a la nueva visión multilateral de países, como los que forman la OPEP y el grupo de los BRICS -Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica- que dejaron de ser un bloque aspiracional y pasaron a convertirse en un bloque geopolítico de pleno derecho en la comunidad internacional. Curiosamente Argentina, la de Alberto Fernández, los Kirchner, dieron un vuelco importante por la dinámica participación en los países de la OPEP. Así mismo Argentina consiguió el respaldo de China para ingresar a los BRICS, pero con el ingreso del gobierno de ultraderecha de Javier Milei se formaliza que Argentina renuncie a integrarse a este nuevo bloque multilateral.
Venezuela, para Estados Unidos se ha convertido en el ojo del huracán financerista, por el fracaso bélico, ¿otro más? En Ucrania y el repudio internacional, inclusive al interior de su país, de las masacres en Palestina. Diríamos… Es el petróleo y la venta de armas…apá. A lo que se suma el caos mediático que se desató a partir del 28 de Julio: intereses intervencionistas de Estados Unidos y sus países satélites, la OEA, medios de comunicación y organizaciones sociales afines. Todo esto se analizará en la segunda parte.