Nahle castiga al Cuitláhuismo
Por: Luis Ramírez Baqueiro
“El verdadero carácter siempre aparece en las grandes circunstancias.” – Napoleón Bonaparte.
Ya desde hace un par de semanas se ha venido comentando en el circuito informativo veracruzano que al interior de Morena un conflicto serio se venía desarrollando.
Los integrantes del círculo rojo han destacado que la confronta entre Rocío Nahle y Cuitláhuac García era real y de pronóstico reservado.
Las acciones ejecutadas en su momento por el actual mandatario veracruzano pusieron en severo riesgo el proyecto transformador de la ex secretaría de Energía al Gobierno Estatal.
Los datos en poder de Nahle García apuntan a que la misma campaña de descalificación por no su oriundez habrían procedido desde el mismo Palacio de Gobierno.
Y es que aun cuando fue Rocío Nahle la que le presentó en su momento a Cuitláhuac García Jiménez al hoy desaparecido pseudo defensor de la negritud, Eric Patrocinio Cisneros Burgos, fue solo García Jiménez el que lo incorporó a su equipo.
Fue por tanto total su responsabilidad ante toda la serie de acciones que emprendió en demérito de Morena, del presidente Andrés Manuel López Obrador y de la misma Rocío Nahle.
Aunado a ello, la actitud por demás incomprensible de continuar sosteniéndolo cercano al arranque del proceso, el haberle dejado participar, y llegar al punto de colocar en riesgo la continuidad del proyecto transformador del presidente López Obrador, habría sido la gota que derramó el vaso.
Sumado a ello, los intentos de personajes muy cercanos al mandatario para ocupar posiciones de elección popular en fórmulas como el mismo Senado de la República ahondaron más la división.
La reciente noticia de que Dorenhy García Cayetano se baja del barco en su intento por alcanzar una curul senatorial responden claramente a ese enfriamiento.
A Cuitláhuac García no le quedaba claro que su poder se terminó en el mismo instante en que se anunció el nombre de Rocío Nahle como la ungida para sucederlo, y con ella, vendrían las designaciones de personajes afines a su proyecto, así como se lee.
Los espacios para darles continuidad a una serie de personajes ligados al mandatario se cerraron y con ello, el comienzo de las actitudes y hasta acciones de traición no se han hecho esperar.
La misma Nahle García tiene ya un informe detallado con nombres, dependencias y cargos de esos personajes a los que tienen puesta ya marcación personal.
Por lo pronto, el distanciamiento de personajes como Eleazar Guerrero, en parte obedecía a mandar el mensaje, aun cuando con él y otro selecto grupo ya se tienen acuerdos previos.
Otro al que le habrían aparentemente dado frío habría sido al secretario de Educación, Zenyazen Escobar García, del que mucho han señalado que si lo dejaron debajo de un templete, la realidad no ha sido así, el ex diputado local, será candidato a la diputación federal por Córdoba, pues su respaldo a Nahle García ha sido irrestricta desde el principio, tanto que durante su aparente búsqueda de la Coordinación de los Comités de Defensa de la 4T, el cordobés hacia abierta campaña por la ingeniera en petroquímica.
Otro al que han pretendido cañonear con todo ha sido al mismo presidente de la Junta de Coordinación Política en el Congreso Local, Juan Javier Gómez Cazarín, quien fue el primero de todos los políticos veracruzanos en proclamar a los cuatro puntos cardinales su predilección por Nahle García.
Procurando manejarse con el más bajo de los perfiles el dos veces legislador local se ha abocado a la tarea de convencimiento de los presidentes municipales de la oposición que se han venido sumando al proyecto de la misma Rocío Nahle, generando que la lista siga creciendo.
Se sabe también que en próximas fechas vendrán serios ajustes en la procuración de Justicia en la entidad, a donde habrán de ejecutarse serios cambios ante la inminente realidad de haber contratado para el cargo a la más mala defensora del estado de la que se tenga memoria, pues en el recuento de las denuncias presentadas por la propia FGE en todas las denuncias se han caído por su pésima integración y ejecución.
Los estertores del cuitláhuismo están a la vista y no habrá poder humano que lo detenga.
Al tiempo.
