Gobierno de Colombia y ELN firman acuerdo sobre construcción de paz
Las delegaciones del Gobierno de Colombia y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) anunciaron hoy la firma de un acuerdo sobre el desarrollo del proceso de participación de la sociedad en la construcción de la paz.
Este último pacto, que da seguimiento al punto uno del Acuerdo de México, reconoció que la paz en Colombia “requiere de todas las voces, todos los pueblos, comunidades, personas, procesos y formas de construir nación”.
Consideraron que este es ya un consenso para la Mesa de Diálogos y por ello, en la “búsqueda de la mayor participación posible” para las transformaciones necesarias, por lo que evaluaron este “proceso histórico y sin precedentes”.
Las delegaciones de paz evaluaron que mientras en el mundo se proyecta la guerra, en “Colombia avanzamos en la participación de la sociedad en la construcción de la Paz”, a partir de encuentros, diálogos e intercambios entre sectores diversos.
El texto explicó que para iniciar este camino de búsqueda de voces, acciones, saberes y métodos, se conformó el Comité Nacional de Participación (CNP), un espacio que desde una lógica colectiva diseñó e impulsó la realización de 78 pre encuentros y encuentros de orden nacional y regional.
Detalló que en los mismos participación ocho mil 565 representantes de organizaciones sociales de 30 sectores; así como tres mil 217 organizaciones en todas las regiones del país, 19 cárceles y la diáspora en 14 países de América Latina, Norteamérica y Europa.
El resultado de este proceso es un Diseño de Participación, un Plan Nacional y unas recomendaciones, señaló, y afirmó que el conjunto de documentos “estará a disposición de la sociedad para su consulta” y resultó la base para la elaboración de este Acuerdo 28.
La Mesa de Diálogos valoró y reconoció el inmenso trabajo y empeño realizado por el CNP, las organizaciones participantes, la secretaría y los equipos técnicos que recogieron y sistematizaron las propuestas.
Agradeció de manera especial el acompañamiento y apoyo de la comunidad internacional, de la Conferencia Episcopal y la Misión de Verificación de las Naciones Unidas.
En esta primera fase se abordaron ejes de diálogo como régimen político, para la construcción de una sociedad en la que tengan cabida todas las opciones y opiniones; modelo económico, que supere las desigualdades; y política ambiental, que discuta las formas de relación con la naturaleza, los territorios y las poblaciones.
Además de educación y cultura, como un proyecto de sociedad que se nutre y fortalece desde sus diversidades sociales, indicó el comunicado.