Cuerpo de Fuerzas Especiales, donde sólo lo mejor del Ejército es capaz de servir
A 39 años de su creación, el Cuerpo de Fuerzas Especiales del Ejército Mexicano está integrado por cuatro mil hombres capacitados para llevar a cabo misiones con alto grado de efectividad, en cualquier tipo de terreno y ambientes complejos y adversos para combatir, desarticular o prevenir, entre otras cosas, actos de terrorismo, narcotráfico y rescate de personas.
Lo más difícil para quien desea convertirse en parte de las fuerzas especiales, es superar la barrera mental que limita la capacidad física y la fortaleza mental para hacer más y mejor las especialidades que desarrollan.
El general José Benito Romero Líbano, comandante del Cuerpo de Fuerzas Especiales de la secretaría de la Defensa Nacional (Defensa) , señaló que la excelencia es lo que buscan todos los militares que buscan pertenecer a este cuerpo, y para ello deben superar lo que se conoce como la barrera del corredor, donde la mente lo hace considerar que no puede más, y aquí, hay ocasiones que consideramos que no podremos concluir el adiestramiento y el curso, sin embargo se impulsa la resistencia moral que se debe tener para cumplir las misiones.
Entre las especialidades que tienen los llamados «murciélagos», como se les denomina en el ambiente castrense, están buzos de combate, francotirador, operaciones urbanas e infiltración.
«Nosotros tenemos seis batallones de fuerzas especiales y contamos con el Centro de Adiestramiento de Fuerzas Especiales, que son cuatro mil elementos. Nos concentramos en donde lo requiere el país, en cumplimiento de las misiones generales del Ejército», dijo el general Romero Líbano.
Estos hombres y mujeres que forman parte del grupo de militares más capacitados de la Defensa Nacional, «realizamos tarea de apoyo a la seguridad pública y a la seguridad interior», señaló el mando castrense.
Entrevistado al término de una muestra para periodistas de lo que es el entrenamiento cotidiano de las Fuerzas Especiales, el general Romero Líbano señaló que existe la posibilidad de que al igual que hace 35 años –cuando se crearon los primeros elementos de este tipo–, también colaboren con autoridades civiles en tareas de seguridad durante el Mundial de Futbol que se realizará en nuestro país el año próximo.
Para quienes buscan ingresar a las Fuerzas Especiales, primero deben causar alta como soldados, y luego de un tiempo en él demuestren su disciplina y compromiso institucional, pueden postularse de manera voluntaria para participar en un proceso de selección en el que de acuerdo con sus estadísticas, solamente tres de cada diez, superan las pruebas de resistencia física y mental.
El origen de las Fuerzas Especiales, tiene su antecedente en enero de 1986, durante el gobierno del presidente Miguel de la Madrid y a iniciativa del entonces titular de la entonces Secretaría de la Defensa Nacional, el general Juan Arévalo Gardoqui, e inicialmente se les denominó Fuerza de Intervención Rápida, con el fin de prevenir posibles actos terroristas durante el mundial de futbol “México 86”.
El personal que conformó el pie veterano de este Cuerpo Especial, recibió su adiestramiento por parte de Fuerzas Especiales de Estados Unidos y la Gendarmería Francesa.
El 1 de agosto de 1990, el entonces secretario Antonio Rivielo Bazán, ordenó el pase de revista de entrada del Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales, estableciendo su matriz en la Plaza de La Paz Baja California Sur y tropas destacamentadas en el Salto, Pueblo Nuevo, en Durango, con lo cual se crearon oficialmente las Fuerzas Especiales.