Activistas provida protestan en el lobby del Congreso de Morelos
Cuernavaca
Integrantes de la asociación Actívate y católicos de la entidad marcharon y realizaron un mitin en el lobby del Congreso local para exigir a los diputados que no voten a favor del aborto; como lo mandató en octubre pasado un juzgado de distrito a la legislatura, mediante un amparo indirecto que ganó el Grupo de Información en Reproducción Elegida, Asociación Civil (GIRE).
“Nosotros estamos defendiendo la vida en todo momento, desde la concepción hasta la muerte, y el día de hoy, creo, los diputados estarán decidiendo si van defender la vida o si van ir por la cultura de la muerte, y asesinar a los bebés que no tienen la facultad de defenderse ellos mismos”, dijo Cecilia Urrea de esa organización civil.
El amparo fue ganado por integrantes del Grupo de Información en Reproducción Elegida, Asociación Civil (GIRE), el pasado 24 de octubre, y ordenaba a los diputados a legislar antes del 15 de diciembre para que “derogue los artículos los artículos declarados inconstitucionales”.
“Nos han dicho los diputados que tienen hasta el 15 de diciembre para tomar la decisión de defender la vida, o legalizar aquí en el estado de Morelos, y Morelos ha sido de los pocos que defendió la vida en todos estos años, y hoy se nos está poniendo esta barrera por presión nacional y por presión de grupos específicos como lo es Gire”, resaltó Urrea.
La activista, manifestó a las diputadas locales que no pueden votar por el aborto, porque hacerlo sería «aprobar el asesinato, el infanticidio, y si hoy por hoy estamos aprobando el matar a una persona que no puede defenderse, en unos años qué va pasar, vamos a legalizar el asesinato a los viejitos, el asesinato es innegociable, no podemos matar a nadie”, recalcó Cecilia.
Esta organización puntualizó que no criminalizan a las mujeres que han abortado, y aseguró que en unos casos entienden que lo hacen porque se sienten solas, y porque, en otros casos, son presionadas por otros; “pero si las invitamos a reconsiderar, porque conocemos a testigos que han abortado, y las consecuencias físicas y emocionales son desgarradoras y son peores”, mencionó Urrea.