Dan inicio las elecciones intermedias de Estados Unidos, repuntan los Republicanos
WASHINGTON. Este martes se llevan a cabo las elecciones intermedias en Estados Unidos, con las que se reordenará el poder en el Congreso y todo apunta a una muy probable victoria del partido Republicano en la Cámara de Representantes, aunque la pelea por el Senado sigue cerrada.
Una victoria republicana en la Cámara de Representantes limitaría de manera considerable los planes y acciones del Presidente Joe Biden, dejándolo vulnerable a una serie de investigaciones sobre su familia y su administración mientras defiende sus logros políticos, incluida una medida de infraestructura radical junto con un importante paquete de gastos sociales y de atención médica.
Un Partido Republicano envalentonado también podría dificultar el aumento del techo de la deuda y agregar restricciones al apoyo adicional a Ucrania en la guerra con Rusia .
Una encuesta de Reuters muestra que un 69% de los estadounidenses considera que el país se encuentra en mal camino, con la mayor parte de los votantes manifestando frustración por los altos precios y responsabilizando a los demócratas
Las últimas encuestas sugieren que los demócratas podrían perder hasta 20 asientos en la Cámara de Representantes, lo que implicaría para el partido perder la mayoría.
No obstante, en el Senado los demócratas aún mantienen una probabilidad de 60% de retener la cámara, pues sólo 35 asientos de la cámara estarán en disputa.
De esta manera, el escenario más probable es un Congreso dividido, que resultaría en un congelamiento de nuevas iniciativas que no cuenten con respaldo bipartidista.
Este escenario, históricamente, ha favorecido a los mercados accionarios.
En general, las elecciones intermedias le caen bien a los mercados accionarios: de acuerdo con Bloomberg, 16 de las últimas 19 elecciones intermedias, los mercados accionarios registraron rendimientos más positivos tras la elección que previo a ella.
Sin embargo, la polarización política en Estados Unidos mantiene vigentes (aunque bajos) los riesgos de un desconocimiento de los resultados por parte del perdedor, algo que podría revivir episodios de inestabilidad política.