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Reelección, la provocación

Por Mónica Camarena Crespo

Andrés Manuel López Obrador muy a pesar de desdeñar y pisotear las leyes, un día y otro también, sabe perfectamente que la Constitución Política establece el principio de la no reelección de tipo total para el cargo de presidente de la República; su artículo 83 dispone que aquel ciudadano que haya ocupado la Presidencia con cualquier carácter, electo popularmente o interino, provisional o sustituto, por ningún motivo podrá volver a desempeñar ese puesto. 

Lo anterior a propósito de lo que presuntos “simpatizantes” de AMLO insistieron en actos públicos para que el tabasqueño se quede en la presidencia después del 2024.

Sacar el tema en este momento, es sin duda un acto de provocación y el deseo cada vez más obvio del presidente de buscar perpetuarse en el poder, con la o el representante más apegado a su doctrina.

El presidente, experto en el arte de la distracción, dijo durante su gira en el estado de Morelos el pasado fin de semana “Ya me faltan dos años y tres meses y ya está tomada la decisión, porque es una cuestión de principios, yo ya me voy a jubilar. Terminando mi mandato ya cierro el ciclo y va haber relevo generacional”, sostuvo.
“Y no se preocupen porque los que vienen a sustituirnos pueden ser mujeres, hombres, hasta mejores que el que les está hablando”, dijo.

En el Estado de México en esa misma gira de trabajo, AMLO “rechazó” la petición de simpatizantes que en dos reuniones consecutivas le pidieron reelegirse. 

No, “primero, por una cuestión de ideales”, por el principio maderista, “segundo, porque hay que buscar que haya relevo generacional, y tercero, no hay que tenerle mucho apego ni al poder y ni al dinero” insistió.

Pero a manera de broma, como si fuese un tema prioritario en la agenda del país, el presidente les dijo a los muy obvios “aplaudidores”.

Además, “ya estoy chocheando”, para enseguida destacar que se siente fuerte, “pero no, a finales de septiembre del 24, ya entrego”.

AMLO esta padeciendo lo que todos sus antecesores empiezan a resentir cuando faltan menos de dos años para dejar el poder y que se sintetiza en la preocupación por no equivocarse a la hora del “dedazo” que busque continuidad, pero que no siempre la asegura, ya ni hablemos de lealtad.

Insistir en la no reelección ante sus simpatizantes solo enrarece el de por sí, tenso ambiente camino al 2024 desde el centro mismo de Morena y sus tribus despedazándose de manera anticipada. Pero así es AMLO y su perversa forma de polarizar a costa del país.

 

Twitter: @monicamarena

 

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